María Oruña
Nº de páginas: 416
Editorial: Ediciones Destino
Año de publicación: 2021
Género: Novela policíaca, negra
Serie: Teniente Valentina Redondo (4)
María Oruña (Vigo, 1976) es una escritora gallega que desde joven conoce a fondo Cantabria. Allí ha ambientado la serie de novelas «Los libros del Puerto Escondido». Puerto escondido (reseña aquí) (2015) fue su exitoso debut en el género negro, Un lugar a donde ir Un lugar a donde ir (reseña aquí) (2017), Donde fuimos invencibles (reseña aquí) (2018), y la nueva entrega Lo que la marea esconde (2021). En todas estas historias de misterio, los protagonistas son los paisajes cántabros y el equipo de la teniente Valentina Redondo, que se ha ganado la admiración de cientos de miles de lectores. También es autora de El bosque de los cuatro vientos (2020), la primera novela al margen de la serie, que supuso su consagración en nuestro país.
Sinopsis
Hay crímenes que parecen imposibles de resolver.
La presidenta del Club de la Bahía de Santander, una de las mujeres más poderosas de la ciudad, ha aparecido muerta en el camarote de una preciosa goleta que con unos pocos y selectos invitados del mundo del tenis surcaba el mar al anochecer.
El crimen recuerda a las novelas de la «habitación cerrada» de principios del siglo pasado: el compartimento estaba cerrado por dentro, tanto la extraña herida que presenta el cuerpo de la empresaria como el misterioso método utilizado para perpetrar el asesinato resultan inexplicables y todos los invitados a la fiesta parecen tener motivos para haber acabado con su vida. Nadie puede haber salido o entrado de la nave para cometer el crimen o escapar. ¿Quién ha matado a Judith Pombo? ¿Cómo? ¿Y por qué?
La novela más ambiciosa de María Oruña, un thriller adictivo y elegante en el que descubriremos una nueva faceta de la vida de Valentina Redondo, quien además de enfrentarse al caso más enigmático de su carrera deberá luchar contra un sorprendente e inesperado golpe en su vida personal.
Opinión personal
Lo que la marea esconde es una lectura del año pasado que tenía pendiente de reseñar. Se trata de la cuarta entrega de la serie protagonizada por la teniente Valentina Redondo. Como digo siempre lo bueno es leer las novelas por orden, aunque sean casos independientes es interesante conocer la vida de los protagonistas, la relación entre ellos y todo lo referente a su pasado.
Lo primero con lo que nos encontraremos al empezar a leer es la situación personal en la que se encuentra la teniente Valentina Redondo. Su vida privada ha sido importante en las anteriores novelas y en esta evidentemente también, incluso tendrá más protagonismo. No voy a desvelar nada, simplemente indicar que su situación y su estado emocional van a ser fundamentales. La veremos más humana que nunca, incluso vulnerable.
Un día podemos soportar con razonable resolución la catástrofe más grande, para sucumbir al día siguiente a una pequeña.
Pero la felicidad nunca ha sido una amiga de la que uno pueda fiarse.
Aunque ella estaba rota por dentro, aunque lo había perdido todo, tal vez no fuese de esa clase de personas inservibles que ya solo pueden dejarse ir con la brisa hasta desaparecer. No, no era ella la que tenía que deshacerse en el viento; era su dolor el que tenía que volar. Siempre habría recuerdos y dentelladas que su memoria le clavaría en el pecho, pero su mera existencia, su lucha contra el mal, tenía todavía un sentido.
Contará con la ayuda de equipo al que ya conocemos de anteriores entregas: su mano derecha el sargento Jacobo Riveiro, el subteniente Santiago Sabadelle, el cabo Roberto Camargo y los agentes más jóvenes, Marta Torres y Alberto Zubizarreta. También con el capitán Marcos Caruso, la forense Clara Múgica y su ayudante Almudena Cardona. El juez en esta ocasión será Antonio Marín, se encuentra de baja el juez Jorge Talavera.
El asesinato que tiene que investigar en esta novela es un caso típico de "habitación cerrada" que recuerda a algunas de las famosas novelas de Agatha Christie como Diez negritos o Asesinato en el Orient Express. De alguna manera es un homenaje que le hace a la famosa autora y a otros de los grandes clásicos del género. Todos los capítulos tienen antes de empezar una frase o párrafo de alguna de sus obras. Empieza con Navidades trágicas de Agatha Christie; en el segundo capítulo repite ella con Muerte en el Nilo; el tercero es para Los crímenes de la calle Morgue de Edgar Allan Poe; le siguen Arthur Conan Doyle y así sucesivamente.
Un asesinato de habitación cerrada como los de aquellas novelas de principios del siglo XX , que entretenían a los lectores jugando a imaginar cuál podía ser en realidad el límite de lo imposible. ¿Era aquel el tipo de misterio al que se enfrentaba ahora Valentina? ¿Qué mundo habría estado encerrado en aquella goleta la noche anterior?
Judith Pombo, la presidenta del Club de la Bahía de Santander es hallada muerta dentro de su camarote. Se encontraba en una goleta (La Giralda) que ha sido restaurada por el club que preside. En ella se estaba celebrando una reunión. Con un reducido número de invitados, entre los que se encontraban además de la víctima:
-Margarita Rodríguez (secretaria de la presidenta del club de tenis).
-Basil Rallis (exjugador de tenis).
-Pablo Ramos (jugador de tenis en silla de ruedas).
-Félix Maliaño (presidente Federación Cántabra de Tenis).
-Victoria Campoamor (vocal Federación Cántabra de Tenis).
-Emilio Rojas (presidente Confederación de Empresarios de Cantabria).
-Marco Fiore (socio de honor del club de tenis). Nacionalidad italiana.
-Rosana Novoa (socia de honor del club de tenis).
También estarán el capitán y la tripulación de la goleta.
Solo se le ocurría que todos fuesen cómplices, pero para aquella posibilidad tendrían que haberse puesto de acuerdo no solo los invitados a la goleta, sino también toda la tripulación. Algo improbable y prácticamente imposible. Demasiadas personas, que ni siquiera se soportaban, coordinándose para llevar a cabo un asesinato en mitad del mar.
Lo inexplicable es que la puerta estaba cerrada por dentro y no había otra forma de entrar. En un primer momento, parece que se ha suicidado, aunque enseguida esa opción quedará descartada. Pero, ¿Quién ha podido cometer el asesinato? Y lo que es más difícil de entender, ¿cómo ha podido hacerlo?
¿Quién habría asesinado a Judith Pombo? ¿Cómo y por qué ?
No puede decirse que no tuviera enemigos. Muchos son los candidatos entre los que se encontraban en la reunión en ese momento.
Pero ninguno de los invitados en el barco ha tenido la oportunidad de entrar en el camarote sin ser visto, y menos salir dejando la puerta cerrada por dentro. Parece un asesinato imposible de resolver.
Con los interrogatorios iremos conociendo a los distintos personajes, sus distintas circunstancias, su relación con la víctima y entre ellos. Y por supuesto los posibles motivos de cada uno para cometer el asesinato. Todo se complicará todavía más cuando la secretaria personal de Judith Pombo muere también asesinada.
—No son las formas, sino los métodos... —observó ella, concentrada—. Son muy diferentes.
Tal vez estemos ante más de un asesino.
Entre otras cosas en esta novela encontraremos buenas dosis de política, apuestas ilegales, negocios sucios, infidelidades, amor...
Volveremos a pasearnos por la costa cántabra y visitaremos el Palacio de La Magdalena. Es una lectura sencilla, rápida, con un misterio que te atrapa desde el principio.
Frases
Tener excusa no es lo mismo que tener justificación.
A aquella mujer no la perseguía la mala suerte, sino que lo que le sucedía era que no esquivaba la vida. Asumía riesgos y tomaba decisiones, y las transitaba hasta el final. La admiraba por ello. Y porque no le parecía tan aburridamente predecible como el resto del planeta.
—Nunca hay poco que no llegue ni mucho que no se acabe —intervino Zubizarreta, con su tono sentencioso habitual—, y la codicia es mala consejera.
¿Por qué permitiremos que algunas personas nos lleven al abismo? ¿O seremos siempre nosotros mismos los que, excusándonos en los demás, marcamos nuestras propias pautas?
Aquel terrible dolor nunca dejaría de pertenecerle, pero no tendría más remedio que dejárselo a la brisa para que lo deshiciese en el aire, para que el viento que sopla cuando sube la marea se lo llevase al mapa profundo de los océanos. Algunos naufragios era mejor que se quedasen en el fondo del mar, dormidos, para que los marineros pudiesen seguir navegando. Con frecuencia, es lo que la marea esconde lo que da valor a cada nuevo latido, a la proeza de vivir.
Lo que la marea esconde es otra entretenida y emocionante novela de la serie de la teniente Valentina Redondo que te enganchará desde el principio.
Lourdes
