Primavera cruel
Serie: Inspector Trevejo (2)
Autor: Luis Roso
Nº de Páginas: 488 págs.
Editorial: Ediciones B
Año de Publicación: 2018
Género: Novela policíaca, negra
Luis Roso (Moraleja, Cáceres, 1988) escritor español licenciado en Filosofía Hispánica por la Universidad de Salamanca, en Filología Inglesa por la Universidad Autónoma de Barcelona y posee un máster de Literatura Española e Hispanoamericana. Actualmente trabaja como profesor de secundaria. Su primera obra protagonizada por el inspector Ernesto Trevejo, Aguacero (reseña aquí) (2016) obtuvo Premio Morella Negra a la mejor novela negra de autor novel de 2016 y fue nominada a mejor Novela Negra por el jurado de Valencia Negra 2017. Primavera Cruel (2018) es la segunda entrega de la serie del inspector Trevejo.
Sinopsis
Madrid, años cincuenta. El inspector Ernesto Trevejo recibe el encargo de enfrentarse a un caso muy difícil: un hombre armado ha aparecido muerto en El Prado, muy cerca del palacio donde reside Franco.
¿Se trata de un terrorista? ¿Un loco? ¿Puede ser una amenaza real?
Una trama policíaca impecable que es, al mismo tiempo, un retrato fiel y alejado de los tópicos de la sociedad de la época. De la mano de un protagonista a la altura de los grandes del género, Luis Roso mantiene al lector literalmente pegado a las páginas de esta novela.
Opinión Personal
En esta ocasión el inspector Trevejo tiene que investigar la muerte de un hombre armado en la entrada al monte de El Pardo, cerca de donde vive Franco. Todo hace pensar que la víctima, Francisco Javier Olegario, intentaba atentar contra el Caudillo. Pertenecía a una célula comunista compuesta por tres personas. Al inspector Trevejo le parece evidente que le mataron cuando intentaba huir, pero ¿de quién? Todo parece complicarse cuando aparece muerto y con evidentes signos de tortura, Genaro Puente Viñas, otro de los integrantes de la célula comunista. Solo queda con vida María, y hay alguien que quiere acabar con ella. Además, los padres de Olegario se encargan de cuidar la masía de los señores Montclar en un pueblo de Lérida. Hasta allí tendrá que ir con el inspector Carlos Bustos, sobrino del comisario Gabriel Rejas, superior de Trevejo, cuando estos aparezcan también muertos.
En Primavera cruel el inspector Trevejo tendrá que investigar entre los miembros del partido comunista y de la oposición clandestina al régimen de Franco. Se las tendrá que ver con confidentes, con opositores al régimen, asesinos profesionales y policías con fama de utilizar todo tipo de torturas para conseguir información o una confesión. Una época en la que la vida de los opositores al régimen no valía nada. Como ocurre en su anterior novela, Aguacero, la ambientación de la España de los años 50 es estupenda. Nos reencontramos con Aparecido, el joven guardia civil que ayuda a Trevejo en la primera entrega de la serie, pero aparece muy poco. Es una pena. Me gustó mucho la pareja que hacían, entiendo que es difícil que siendo guardia civil encaje en otra investigación con él; en esta ocasión será de gran ayudará en Barcelona el inspector Heliberto Vázquez.
Es una novela que me ha encantado. Se lee rápido, tiene un ritmo que no decae en ningún momento. Leí hace un año Aguacero y ya tenía ganas de reencontrarme con el inspector Trevejo. Ahora a esperar que publique otra nueva entrega de la serie.
En Primavera cruel el inspector Trevejo tendrá que investigar entre los miembros del partido comunista y de la oposición clandestina al régimen de Franco. Se las tendrá que ver con confidentes, con opositores al régimen, asesinos profesionales y policías con fama de utilizar todo tipo de torturas para conseguir información o una confesión. Una época en la que la vida de los opositores al régimen no valía nada. Como ocurre en su anterior novela, Aguacero, la ambientación de la España de los años 50 es estupenda. Nos reencontramos con Aparecido, el joven guardia civil que ayuda a Trevejo en la primera entrega de la serie, pero aparece muy poco. Es una pena. Me gustó mucho la pareja que hacían, entiendo que es difícil que siendo guardia civil encaje en otra investigación con él; en esta ocasión será de gran ayudará en Barcelona el inspector Heliberto Vázquez.
Es una novela que me ha encantado. Se lee rápido, tiene un ritmo que no decae en ningún momento. Leí hace un año Aguacero y ya tenía ganas de reencontrarme con el inspector Trevejo. Ahora a esperar que publique otra nueva entrega de la serie.
Frases
Ya sabes, perro ladrador, poco mordedor. Pero cuando el perro calla es que está cavilando la mejor manera de arrear el bocado.
Yo hace tiempo que me niego a tener tratos con mujeres. Todo lo llevan al terreno del dramatismo. Y encima a veces hasta se enamoran. También algunos hombres se enamoran, pero les amenazas con irte de la lengua y se les pasa. Las mujeres en cambio cuando se enamoran son capaces de enfrentarse al mundo entero. Es por todas esas novelas de amor que leen, que les tiene sorbido el seso.
Si de algo me arrepiento es de no haber aprendido a leer mejor y haber leído más cuando mis ojos estaban en condiciones. Pero leo la Biblia de vez en cuando.
—Yo la tengo a medias, aunque una vez en misa me contaron el final.
—Yo a misa dejé de ir hace tiempo, pero la oigo por la radio algunas mañanas.
—¿Usted también? Lo que faltaba. Está la escalera llena de beatas, todo el día escuchando al padre no sé qué y a la hermana no sé cuánto.
—Yo lo hago más que nada por purgar algún pecadillo que otro.
Primavera cruel es otra interesante novela del inspector Trevejo, con una buena ambientación de la España de la dictadura, con esa oposición en la clandestinidad y la represión policial.
Lourdes
Lourdes
Por una cosa y por otra, he ido dejando de lado esta saga que en su momento me apeteció.
ResponderEliminarBEsos.